Todas las pertenencias históricas que hacen al acervo cultural identitario de Carlos Casares conviven en un diálogo permanente con los visitantes que a diario recorren el museo municipal, dependiente de la Subsecretaría de Cultural a cargo de la Lic. Vanina González.
Ubicado en uno de los patrimonios arquitectónicos más emblemáticos de la ciudad, en la esquina de las Avenidas Cecilia Borja y San Martín, la Jefa de área encargada del espacio, María Fabiana Molina, es la guía turística del partido girasolero.
“Nuestra prioridad en este caso es recuperar aquellos lugares patrimoniales que integran los circuitos turísticos que se realizan junto a los visitantes que por distintos motivos llegan a nuestra ciudad y desean conocer la historia”, prologa Fabiana Molina.
Las relaciones sociales son claves a la hora de pensar en un circuito turístico. En tal sentido, Casares forma parte del Consejo Provincial de Turismo (COPROTUR), siendo parte del polo siete que, está integrado por 25 municipios del noroeste de la provincia de Buenos Aires.
En lo que se refiere a Turismo, durante la pandemia los distintos lugares turísticos y patrimoniales estuvieron vacíos, pero esta situación también permitió un cambio de turismo por parte de aquellos que recorren distintos lugares de la provincia y más. Pues para evitar el aglomeramiento de gente los turistas eligen lugares apartados, verdes, cercanos. “Es allí donde nosotros que no tenemos playas, montañas ni ríos nos beneficiamos debido a que, en busca de esparcimiento, tranquilidad y descanso llegan hasta nuestro distrito”, cuenta Molina.
El turismo representa un sector importante en lo que respecta a la economía de muchos países debido a que genera empleos, ingresos y un efecto multiplicador en sus destinos propio de los procesos de desarrollo local y, tiene un gran potencial para contribuir con el desarrollo de las comunidades.
En lo que respecta al Museo Histórico, “es un lugar representativo donde se resguarda tanto las donaciones de los vecinos y se custodia la historia en cada elemento que aquí se encuentra.
Nuestro propósito es llevar elementos del museo a distintas instituciones a las que queremos llegar para mostrar la historia, en consecuencia, elegimos ser un museo de puertas abiertas”, suma.
“Recibimos muchas visitas diarias que nos ayudan a seguir trabajando por este valor patrimonial y notamos que el boca a boca existe y, eso es lo que nos importa, que sean transmisores de información contando sobre los importantes lugares arquitectónicos, patrimoniales y culturales que en nuestra ciudad tenemos. Apelamos al cuidado de esas esculturas, murales y sitios que son testigos fieles de nuestra historia”.
Desde la Dirección de Cultura y el Museo, González y Molina saben que hay mucho por hacer y en eso trabajan.
