“Tuvimos un año de mucho trabajo intenso, algunas cosas nos arrancaron una sonrisa, otras tantas nos arrancaron alguna lágrima, pero estamos de pie y fuertes, decididos a mostrar que Argentina no tiene que caer ni en el ajuste, ni en el pasado, ni en la corrupción”, afirmó el líder del espacio.
Ese será el punto de partida del tigrense para encarar el 2018, año donde espera reforzar la identidad de su espacio político. Esa fue la línea que bajó ayer, durante un encuentro realizado en el Museo de Arte Tigre del cual participaron diputados, legisladores, intendentes, concejales y dirigentes del Frente Renovador.
Sobre su postura sobre el peronismo, Massa sigue sosteniendo que por ahora “no alcanza” con la renovación de nombres en el PJ Bonaerense para hablar de “unidad”. Si bien rescata la figura del “Tano” Menéndez, todavía está a la espera de cambios de fondo.
Cuando le piden definiciones, Massa responde que ahora más que nunca sus aliados son el tiempo y la paciencia, aunque la falta de movimientos aquí y ahora puedan costarle alguna derrota más. A nivel nacional, estima que la grieta, tarde o temprano, dará paso a una tercera vía. Aún sueña con caminar triunfante por la ancha avenida del medio.
En el territorio bonaerense, lo mismo. Si bien acepta que hoy la Gobernadora es casi imbatible, pone reparos: “Vidal es como el ciclista que va chupado a un camión en la ruta. Los bichos revientan todos en el vidrio del camionero que es Macri y ella pedalea atrás tranquila. Quiero ver qué va a pasar cuando esa protección no esté más”.
Por último, Sergio Massa dejó en claro que en la política hay momentos donde uno tiene que ser paciente y saber esperar, seguir trabajando y formando equipos para el momento de dar la batalla. Con Margarita sigue todo en pie, pero hoy sus fichas están puestas en el dialogo con los gobernadores. ¿Pensará en reconstruir el peronismo, pero sin tener el sello del PJ?.